TIPOS DE LÁPICES DE COLORES:
Existen 3 tipos de lápices de colores:
1- Lápices de colores,
2- Lápices de colores solubles al agua,
3- Lápices de colores solubles en trementina.
Las dos últimas, permiten el aumento de las posibles manipulaciones y técnicas a la hora de ponernos a pintar.
Cuando utilizamos lápices de colores sin ningún tipo de disolvente, nuestra pintura resultará "suave" debido al efecto del grano del papel, aunque usemos papel H.P., ya que los lápices dejan una especie de malla formada por pequeñas endiduras del color del papel que el pigmento no ha cubierto.
En cambio, si utilizamos cualquier tipo de disolvente (agua o trementina, según el tipo de lápiz), éstas partes del papel que la malla no cubría antes, ahora sí se cubren, lo que da un aspecto de acuarela.
SOPORTES PARA LÁPICES DE COLORES:
Para conseguir permanencia en el dibujo el mejor soporte que podemos elejir es el papel blanco bien aprestado, hecho con un 100% de trapos, y la superficie H.P. permite la delicadeza de la técnica. Las marcas sobre papel prensado en frío (papel NO), son totalmente diferentes a las que se consiguen sobre papel suave H.P. ya que las hendiduras del papel son más voluminosas.
Ya, la elección depende del resultado que queramos conseguir.
USO DE LOS LÁPICES DE COLORES SOLUBLES AL AGUA:
Cuando utilizamos los lápices solubles al agua sin usar el disolvente (agua), el resultado será un poco más suave que cuando utilizamos lápices de colores normales.
La apariencia de acuarela se consigue mojando un pincel adecuado (lo podemos dejar húmedo o muy mojado, dependiendo del efecto que queramos conseguir) y pasarlo sobre el trabajo a lápiz acuarelable que hayamos realizado
Para esta técnica debemos pintar con el pincel sobre las marcas de manera rápida y con seguridad. para que los colores no se emborronen ni se mezclen mucho. así se seguirán viendo las marcas de lápiz originales del dibujo.
Hay que tener cuidado, porque si mojamos el pincel excesivamente, seguramente perderemos el color, al quedar demasiado diluido.
Tampoco debemos trabajar excesivamente la superficie del papel.
USO DE LOS LÁPICES DE COLORES EN SECO:
Creo que los más importante a decir sobre ésta técnica el que cuando queramos conseguir un tono homogéneo, tenemos que tener paciencia y no apretar el lápiz sobre la superficie del papel, sino que debemos aplicar el color de forma gradual para intensificarlo, con un mínimo de 2 pasadas. La presión ejercida debe de ser suave siguiendo el movimiento natural del brazo hacia delante y hacia atrás a gran velocidad girando el lápiz entre los dedos buscándole el mejor lado.
COMO CONSEGUIR LAS ZONAS BLANCAS:
Para conseguir el blanco en una pintura a lápiz, tanto solubles como en seco, se debe dejar la zona que queremos que sea blanca sin pintar, ni siquiera pueden llevar las marcas del lápiz, ya que resultará luego imposible borrar esas marcas ni con una goma.
Hay que detener el lápiz justo en el borde de la zona que se desea dejar en blanco.
Existen 3 tipos de lápices de colores:
1- Lápices de colores,2- Lápices de colores solubles al agua,
3- Lápices de colores solubles en trementina.
Las dos últimas, permiten el aumento de las posibles manipulaciones y técnicas a la hora de ponernos a pintar.
Cuando utilizamos lápices de colores sin ningún tipo de disolvente, nuestra pintura resultará "suave" debido al efecto del grano del papel, aunque usemos papel H.P., ya que los lápices dejan una especie de malla formada por pequeñas endiduras del color del papel que el pigmento no ha cubierto.
En cambio, si utilizamos cualquier tipo de disolvente (agua o trementina, según el tipo de lápiz), éstas partes del papel que la malla no cubría antes, ahora sí se cubren, lo que da un aspecto de acuarela.
SOPORTES PARA LÁPICES DE COLORES:
Para conseguir permanencia en el dibujo el mejor soporte que podemos elejir es el papel blanco bien aprestado, hecho con un 100% de trapos, y la superficie H.P. permite la delicadeza de la técnica. Las marcas sobre papel prensado en frío (papel NO), son totalmente diferentes a las que se consiguen sobre papel suave H.P. ya que las hendiduras del papel son más voluminosas.
Ya, la elección depende del resultado que queramos conseguir.
USO DE LOS LÁPICES DE COLORES SOLUBLES AL AGUA:
Cuando utilizamos los lápices solubles al agua sin usar el disolvente (agua), el resultado será un poco más suave que cuando utilizamos lápices de colores normales.
La apariencia de acuarela se consigue mojando un pincel adecuado (lo podemos dejar húmedo o muy mojado, dependiendo del efecto que queramos conseguir) y pasarlo sobre el trabajo a lápiz acuarelable que hayamos realizado
Para esta técnica debemos pintar con el pincel sobre las marcas de manera rápida y con seguridad. para que los colores no se emborronen ni se mezclen mucho. así se seguirán viendo las marcas de lápiz originales del dibujo.
Hay que tener cuidado, porque si mojamos el pincel excesivamente, seguramente perderemos el color, al quedar demasiado diluido.
Tampoco debemos trabajar excesivamente la superficie del papel.
USO DE LOS LÁPICES DE COLORES EN SECO:
Creo que los más importante a decir sobre ésta técnica el que cuando queramos conseguir un tono homogéneo, tenemos que tener paciencia y no apretar el lápiz sobre la superficie del papel, sino que debemos aplicar el color de forma gradual para intensificarlo, con un mínimo de 2 pasadas. La presión ejercida debe de ser suave siguiendo el movimiento natural del brazo hacia delante y hacia atrás a gran velocidad girando el lápiz entre los dedos buscándole el mejor lado.
COMO CONSEGUIR LAS ZONAS BLANCAS:
Para conseguir el blanco en una pintura a lápiz, tanto solubles como en seco, se debe dejar la zona que queremos que sea blanca sin pintar, ni siquiera pueden llevar las marcas del lápiz, ya que resultará luego imposible borrar esas marcas ni con una goma.
Hay que detener el lápiz justo en el borde de la zona que se desea dejar en blanco.
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